‘NeXT: Steve Jobs y Paul Rand’
En 1985 Steve Jobs dimitió, o fue expulsado, como presidente de Apple cuando decidió fundar una nueva empresa llamada Next que iba a producir ordenadores potentes y personales dirigidos al sector de la educación superior.

Jobs llevaba tiempo hablando con académicos, preguntándoles qué elementos necesitaría un ordenador para mejorar sus tiempos y trabajos de investigación. El sueño de cualquier investigador era contar con un equipo de trabajo que fuera a la vez potente y personal, algo que Jobs ya había intentado en Apple con el proyecto “Big Mac” (sistema operativo Unix e interfaz Macintosh), pero el proyecto acabó cancelado.
Así que, aburrido y sin responsabilidades reales en Apple, Jobs decidió fundar una nueva empresa llamada Next, que iba a producir ordenadores potentes y personales dirigidos al ámbito de la educación superior. Por supuesto, este movimiento de Jobs unido al hecho de que para ello se llevara consigo cinco de los empleados más antiguos y con más talento de la multinacional, hizo que las relaciones entre Apple y Jobs fueran más bien tirantes, con demandas de por medio, y a la postre, el detonante de la salida de Jobs de la compañía y la venta de la totalidad de sus acciones (menos una) en los siguientes meses.
«Nadie se cree que una empresa valorada en dos mil millones de dólares y con 4.300 empleados no pueda competir con seis personas vistiendo vaqueros».
Steve Jobs
En Next, una compañía sin trabas para Jobs, su pasión por el diseño afloró desde el primer momento. Decidió que necesitaba un logotipo de primera clase así que pensó en el diseñador gráfico Paul Rand, que por aquel entonces contaba ya con 71 años (Jobs tenía 30), y era reconocido por sus trabajos para IBM, la revista Esquire o el servicio de mensajería UPS, entre muchos otros. Rand había firmado recientemente un contrato con IBM, lo que suponía un conflicto de intereses con las pretensiones de Jobs, pero éste, tras dos días de llamadas se la arregló para conseguir el permiso de IBM y pudo así contactar con Rand.
Rand voló a Palo Alto y estuvo allí un tiempo paseando con Jobs, escuchando su propuesta, su visión, la forma cúbica, perfecta y sencilla que tendría el ordenador. Cuando Jobs le preguntó si pensaba preparar varias opciones para que él eligiera una, Rand le dijo que él no creaba opciones diferentes para sus clientes, él resolvía un problema y cobraba por ello, le presentaría una opción y le pagaría por ella, la utilizase o no.
«Resolveré tu problema y tú me pagarás –le dijo a Jobs–. Puedes utilizar lo que yo produzca o no, pero no presentaré varias opciones, y en cualquiera de los casos me pagarás».
Paul Rand
Parece que Jobs admiraba aquel tipo de razonamiento. Se sentía identificado con él y accedió a entregar a Rand 100.000 dólares como único pago a cambio de un único diseño. Jobs era rico y joven, Rand era una estrella del diseño, viejo y astuto.
Tras dos semanas, el maestro diseñador nacido en Brooklyn tenía el trabajo hecho. Voló de nuevo a casa de Jobs y, tras la cena, entregó a Jobs y a su equipo un elegante cuaderno que describía el proceso mental tras el encargo. Es una suerte poder ver el momento, existe un vídeo donde se puede ver al zorro Rand con sus libros en las manos mientras Jobs y su equipo hojean el cuaderno en un tono distendido. Es una maravilla también poder leer y admirar el cuaderno de Rand para NeXT (ya no era Next), un imprescindible para cualquier estudiante o profesional del diseño, un cuaderno sencillo pero de pensamiento profundo y gran conocimiento de una profesión. El vídeo, el proyecto, el cuaderno y mucho más pueden consultarse en la página oficial de Paul Rand.
El fantástico libro “Steve Jobs” de Walter Isaacson, del cual he extraído la mayor parte de la información para este pequeño artículo, nos deja en su capítulo dedicado a NeXT una anécdota que me ha hecho pensar, y es que, parece ser que Jobs coincidió en esa época con el Rey Juan Carlos I en una cena en San Francisco, fueron presentados y tras una “conversación eléctrica” en la que Jobs explicaba su visión de la próxima generación de ordenadores el rey garabateó algo en una nota y se la entregó a Jobs. Parece ser que Jobs le acababa de vender un NeXT a Juan Carlos I, quede claro que esta no me la esperaba.

La política en la ficción
‘La política en la ficción.’ La figura del líder político y la personalización del partido, el debate constante, e incluso las redes sociales son algunos de los elementos que han convertido a la política en una especie de espectáculo, que en ciertas ocasiones sirve como entretenimiento para el votante y espectador. Si entretiene en la […]

Teatro y política: la representación de una representación
Actualmente, vivimos en un juego de espejos en el que nunca sabes cuál es la realidad y, sobre todo, quién se esconde tras el personaje que se sube al escenario. Pero, ¿qué puede decirse en escena? ¿Qué no debe decirse en un parlamento? ¿Hay alguna relación entre el teatro y la política? ¿Es el teatro político? ¿Es la política puro teatro?
Comparamos, analizamos, reflexionamos sobre estas cuestiones a través de la visión de cuatro piezas escénicas valencianas.

Cambia la agenda, cambia el discurso: el feminismo a ojos del hoy
Durante muchos años, la agenda feminista ha estado marcada por los asuntos que rigen la actualidad. El 8M las instituciones públicas y partidos cambian el color de sus logos y ponen en marcha diversas campañas e iniciativas. Este año, los lemas, eslóganes y cartelería se leen con los ojos del aquí y del ahora. Unos lemas cargados de lucha conjunta, sororidad y con un marcado discurso que refleja las ideas de cada partido, así como las crispaciones y confrontaciones dentro del propio feminismo.

El poder de la ilustración en la comunicación institucional
La ilustración se ha convertido en un elemento clave para comunicar, expresar y dejar constancia, dentro y fuera del ámbito institucional. Asimismo, tiene la capacidad de llegar al público de una manera coherente, atractiva y efectiva. En definitiva, la ilustración tiene un poder inmenso. Y, además, es un recurso que puede convertir las campañas y la publicidad en algo memorable.

La poesía: arma cargada de futuro en los discursos políticos
Desde antaño, las plazas, los foros, los paraninfos, los congresos o los lugares de cierta envergadura política se han convertido en un desfile de sabiduría e intelectualidad. Verborrea prolija y cuidadosa. Palabras que entran con calzador o sin él. Metáforas abiertas y trabajadas. Versos meticulosos y directos. En definitiva: poesía.