‘Ciberleviatan: democracia vigilada’

¿Puede la tecnología avanzar tanto que cambie el funcionamiento de la democracia? ¿Es necesario regular el uso de los datos de la red? ¿Son las redes sociales una extensión de nuestra forma de ser? Puede que la respuesta a todas estas preguntas sea un sí, incluso muchos de nuestros lectores y lectoras, hayan llegado a esta reseña a través de un red social. Pero, ¿de dónde venimos y hacia dónde vamos?
Thomas Hobbes fue un filósofo inglés del Siglo XVII. Entre sus obras más destacadas encontramos el “Leviatan”, un escrito básico en la composición de los estados modernos. ¿Pero que esa figura mitológica aplicada a la política?, pues según el propio autor, es una figura terrorífica, a la par que necesaria, que encarna el gobierno y que su objetivo es que se establezca una paz y un orden perpetuo, necesario para que la sociedad y el ser progrese sin verse amenazado por el resto de los individuos que componen dicha sociedad.
José María Lassalle nos trae una reinvención del mismísimo “Leviatan”, ahora convertido en un ser mitológico digital, entorno al cual encontramos que muchos fieles son seguidores cultistas, al más puro estilo de las novelas de H.P. Lovecraft, y que ha despertado para apoderarse de toda la sociedad. El Ciberleviatán es una reinvención del clásico de Hobbes, el cual nos explica el colapso de la democracia liberal frente a una revolución digital permanente.
La tecnología y nosotros
Como todos en nuestro día a día podemos comprobar, la tecnología y las redes sociales, nos engloban en todas nuestras acciones cotidianas. Ya no tenemos que ir a una tienda a comprar ropa, basta con tener una cuenta y una tarjeta de crédito vinculada, y en unos días tendremos lo que hemos comprado en nuestra casa, sin ni siquiera haber andado 10 metros.
Algo por estilo ocurre con la política. La revolución digital permanente ha generado que, la libertad como la conocemos, sea controlada por los datos y los algoritmos y, es por tanto, que, la democracia tal y como la conocemos, sea controlado por las grandes empresas tecnológicas. ¿Que quiere decir esto? Que tendremos democracia y libertad hasta donde nos deje la tecnología. ¿Que supone una democracia limitada por la tecnología? Que llegamos hacía, como señala José María Lassalle, a una dictadura digital. Como ejemplos tenemos a EEUU y China, y su batalla por desarrollar mejor tecnología que nos controle a través de la Inteligencia Artificial, el Big Data o el Machine Learning.
El gigante se ha despertado de su letargo y los estados, así como, las empresas transnacionales enfocadas en el sector digital, están intentando domesticarlo. Como una suerte de Gran Hermano al más puro estilo de George Orwell en su novela “1984”, el control parece absoluto en todas las facetas de nuestra vida cotidiana y, no solo eso, sino que estamos regalando todos nuestros datos para ellos a cambio de tener una “libertad” en en el mundo de internet.
Qué nos depara el futuro
“La noche es oscura y alberga horrores” como diría Melisandre. El futuro es igual de oscuro. Ni siquiera dichas empresas y su tecnología pueden predecir el futuro. Es por ello que, Lassalle, propone varias ideas: desde una Europa que luche contra la tiranía del Ciberleviatan hasta una regulación estricta más dura de los datos que disponen las empresas.
En definitiva, el Civerleviatan parece que ya se ha alzado y amenaza con devorar todo lo que el ser humano ha construido como sociedad. El monstruo parece cada vez más hambriento y son necesarios valientes guerreros que luchen contra ellos. La guerra esta por venir y, como diria William Wallace, “pueden quitarnos la vida, pero jamás nos quitarán… ¡La libertad!”

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